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miércoles, 26 de agosto de 2015

Propiedades curativas del ajo


El ajo es un ingrediente habitual en muchas de nuestras comidas. Sin embargo, muchos ignoramos que, además de otorgar un toque inconfundible a nuestros alimentos, el ajo también puede mejorar significativamente nuestra salud.
Durante mucho tiempo, las propiedades curativas del ajo han sido utilizadas en la preparación de medicamentos naturales – por ejemplo, por sus efectos diuréticos, causados por la acción de sus aceites esenciales y sus azúcares de bajo peso molecular –; y recientemente, han surgido diferentes estudios científicos que validan su uso como remedio eficaz para muchas otras afecciones. Pero, ¿qué hace del ajo un alimento tan bueno para nuestro bienestar?
El ajo es un elemento muy efectivo en la prevención de todo tipo de enfermedades y males cardiovasculares. Así, por ejemplo, el ajo ayuda a reducir la presión arterial en las personas, gracias a que estimula la producción de ácido sulfhídrico, el cual relaja los vasos sanguíneos y mejora el flujo de la sangre en el organismo. Además, ayuda también a prevenir y reducir el endurecimiento de las arterias que dificulta la circulación.
Por otro lado, el ajo es también excelente para la digestión. Aunque en algunas personas puede generar gases, y no se recomienda para quienes padecen de acidez o males gástricos fuertes, el consumo de ajo brinda grandes beneficios para el sistema digestivo, ya que ayuda a procesar mejor nuestros alimentos.
Así, el ajo colabora en la eliminación de desechos del organismo, ayuda a prevenir las inflamaciones estomacales e intestinales, e incluso puede eliminar bacterias dañinas en los intestinos, sin afectar a aquellas que ayudan en el proceso de la digestión.
Como se mencionó al principio, el ajo es también un excelente diurético, facilitando la eliminación de líquidos y toxinas. Para lograr este efecto en nuestro organismo, basta con realizar la siguiente fórmula, muy sencilla: Mezclar unos cuantos dientes de ajo molidos en un litro de agua y consumir diariamente dos vasos de este preparado, durante dos semanas. Se debe esperar al menos una semana para volver a consumirlo.